ESTOS SON NUESTROS PASTORES
Don José Luis Chávez Botello es el mayor de 12 hermanos, nació en el seno de una familia humilde, el 8 de febrero de 1941 en Tototlán, Jalisco, actualmente Diócesis de San Juan de los Lagos, en donde recibió la corona del martirio el Presbítero San José Sabás Reyes Salazar, mártir cristero, protector de niños y jóvenes huérfanos. Precisamente por haber vivido la dura persecución religiosa, Jalisco es un semillero de vocaciones sacerdotales, en la familia de Don José Luis, por ejemplo, otros dos hermanos suyos también eligieron el Sacerdocio.
Su vocación nació y la descubrió poco a poco, todo inició con una providencial "confusión" de su Párroco, quien creía que el pequeño José Luis acudía por gran devoción diariamente a la Misa de 6 de la mañana; sin embargo, según nos cuenta nuestro Arzobispo, iba al templo para cobijarse del frío que pegaba en el molino cercano, al que tenía que llevar todas las mañanas el nixtamal a moler, pues por ser el mayor de los hermanos ayudaba a su mamita que se dedicaba a hacer tortillas y a lavar ajeno.
Primero fue llamado por su Párroco para ser monaguillo, luego ingresó al Seminario de Guadalajara (de 1955 a 1966); posteriormente fue enviado a Roma donde obtuvo la Licenciatura en Teología Dogmática. Luego de prácticamente 15 años de estudio, recibió la Ordenación Sacerdotal en Roma el 8 de diciembre de 1969; ahí mismo tomó el curso de Ciencias de la Educación y luego obtuvo la licenciatura en Pastoral y Catequesis por el Instituto Lumen Vitae de Bruselas.
Fue nombrado, por Su Santidad Juan Pablo II, Obispo Titular de Cova y Auxiliar de Guadalajara el 21 de febrero de 1997, siendo consagrado el 19 de marzo del mismo año. El mismo Papa lo nombró Obispo de Tuxtla, Chiapas el 16 de julio de 2001; y el 8 de noviembre de 2003 lo nombró el VII Arzobispo de Antequera-Oaxaca, tomando posesión el 8 de enero de 2004.
En la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) ha tenido una participación sobresaliente, como también en el Consejo del Episcopado Latinoamericano (CELAM), principalmente en el ámbito de la Catequesis, colaborando activamente en la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano en Aparecida (2007). Tomó parte también en la Visita Ad Limina de 2005, ante el hoy Papa Emérito Benedicto XVI; y en la de 2013, ante el Papa Francisco; también participó en octubre de 2012 en el Sínodo de los Obispos en Roma, y ese mismo año fue nombrado Miembro del Consejo Internacional de Catequesis del Pontificio Consejo de la Nueva Evangelización.
Han sido 13 años de recorrer y pastorear esta Arquidiócesis, implementando líneas de acción que respondan a los desafíos de una comunidad que no ha escapado al deterioro social que impera en tantos estados y países. Ha sido, sin duda, una de las principales herramientas el Plan Diocesano de Pastoral, la reorganización del Presbiterio, la renovación de la Curia, así como la promoción y la acción en favor de la reconciliación y la paz en nuestro Estado, para lo cual tuvo gran relevancia la Coronación Pontificia de la imagen de Nuestra Señora de Juquila, realizada en 2014, gracias a la petición que le hizo al Papa Francisco.
Su papá ya no lo vio después de su Ordenación Sacerdotal, su primera Misa en México fue precisamente para su funeral, pero Don José Luis la celebró con la esperanza de quien tiene firme fe en la vida eterna. Su mamá, en cambio, aún vive, incluso a sus casi 97 años, vino a Oaxaca este 20 de marzo para celebrar en el Seminario Pontificio de la Santa Cruz los 20 años de Servicio Episcopal de su hijo; festejo al que también asistieron otros 7 Obispos, casi un centenar de Sacerdotes, Diáconos y más de mil fieles de los distintos decanatos; todos unidos en torno a nuestro Pastor, aquel a quien el Espíritu Santo ha confiado esta Arquidiócesis, para constituirse, como decía San Ignacio de Antioquía, en "imagen viva de Dios Padre". ¡Que así sea!
LUBIA ESPERANZA AMADOR.